México del Norte: Los adventistas lloran la pérdida de pastor y diácono asesinados

Los adventistas del séptimo día en Juárez, Chihuahua, norte de México, todavía están asombrados por la muerte del pastor Lenin Avila Cortez y el diácono Javier Zavala Rodríguez. Según las autoridades locales, los dos hombres fueron muertos a tiro en la noche del martes 18 de mayo, mientras estaban sentados dentro del auto del pastor Ávila, fuera del hogar de Zavala.

Los investigadores dijeron que Ávila, de 28 años de edad fue abaleado tres veces y Zavala, de 30 años, recibió 17 disparos. Los líderes locales de la iglesia creen que, temprano, los dos habían estado visitando hogares de miembros, y que los disparos fueron por error de identidad. La policía está aún investigando el crimen y no han anunciado si tienen sospechosos.

"Estamos muy entristecidos por esta pérdida", dijo el pastor José Luís Jiménez, presidente de la Misión del Norte. "Es la primera vez que alguno de nuestros passtores o miembros han sido afectado tan trágicamente en esta región".

"El pastor Ávila era un pastor joven que crecía en su ministerio, y hacía un excelente trabajo en su distrito", dijo Jiménez, que viajó a la ciudad capital de México para su servicio fúnebre, que se realizó el viernes 21 de mayo. El pastor Ávila, que tenía siete años de servicio en la iglesia, atendía nueve iglesias y congregaciones con cerca de 700 miembros de iglesia en uno de seis distritos en la región Norte de México. Le sobrevive su esposa Joana Gómez, quien está embarazada y su hijo de tres años.

Javier Zavala, que era el director de diáconos en la Iglesia Adventista de Zaragoza, trabajaba muy de cerca con Ávila sirviéndole a las familias de la iglesia en la región. Su servicio fúnebre se llevó a cabo el 20 de mayo en su ciudad natal, Zacatecas. A zavala le sobrevive su esposa Laura Lares.

Se espera que los dirigentes de la iglesia tendrán respuestas en unas semanas.

"Esta tragedia ha traído mucha preocupación", dijo Jiménez. "Estoy preocupado por los 17 pastores, ancianos y diáconos en nuestros distritos que pueden estar expuestos a la violencia al servirle a la feligresía". Jiménez dijo que los dirigentes de la iglesia están programando tener una reunión especial con todos sus pastores a fin de establecer medidas preventivas a seguir a fin de evitar una tragedia similar.

"Sabemos que el trabajo debe continuar en los buenos tiempos así como en los difíciles", dijo Jiménez.

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